"El principio" - dice David Feiman, director del proyecto-, es concentrar la luz y utilizar poco material. Hemos construido un enorme plato de vidrio con forma de parábola. Éste no solamente capta la luz, sino que también la concentra en un punto.
"De una célula convencional de 100 cm2 y que producía, con los métodos existentes, un watio de eletricidad, logramos producir 1.500 watios. Así, el costo de una pequeña célula es 1.500 más barato"
Y es ahí donde está el quid de la cuestión, ya que el Silicio utilizado en la fabricación de paneles solares se obtiene de la cuarcita y ha de ser muy puro.
En los últimos tiempos, debido al enorme incremento en la producción de paneles solares (en torno al 40% anual en todo el mundo) el silicio empieza a escasear. Este material, es también la base de los componentes que fabrica la industria microelectrónica y el aumento en la capacidad de producción de paneles solares ha agotado las ampliaciones en la producción de Silicio, creándose una dura competencia por el Silicio entre la industria fotovoltaica y la industria microelectrónica.
Sus creadores afirman que una célula de 10 cm2 construida mediante la nueva tecnología, puede reemplazar a 15 m2 de células convencionales.
El diseño me ha recordado a los hornos solares de concentración con los que trabajábamos en ingeniería sin fronteras. ( a los que espero dedicar un post próximamente )
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