El petrolero
Exxon Valdez fue un petrolero tristemente célebre porque el 24 de marzo de 1989, con una carga de 1,48 millones de barriles de crudo, derramó en el Prince William Sound, Alaska, 37.000 toneladas de hidrocarburo.
Esa catástrofe despertó la curiosidad del peluquero Phil McCrory, que durante años gracias a su trabajo había comprobado la cantidad de aceite que el pelo es capaz de absorber. Poco a poco empezó a probar cuánto petróleo podía absorber con el pelo que le sobraba en la peluquería, y abrió un almacén de recortes de pelo en San Francisco.
En el año 2000 comenzó a desarrollar una alfombra de pelo que sirviera para este tipo de trabajos de limpieza y creo el proyecto
Matter of trust gracias al cual miles de salones de belleza y peluquerías donan actualmente su exceso de pelo ser reciclado a modo de alfombrillas absorbentes. Actualmente esa cantidad de pelo asciende a medio kilo diario.
Los propios donantes cubren los gastos de envío, cuya recompensa es saber que están ayudando a limpiar los derrames de petróleo. El programa Matter of trust también acepta otras fibras naturales tales como pelo de perro, pelo de caballo, los residuos de lana, e incluso las medias de nylon que rellenadas de pelo se utilizan para contener los derrames.
una historia preciosa, viene que "ni al pelo" para hablar de los pequeños gestos que, juntos, consiguen grandes resultados
que bueno. estás genial, ya se que hacer con mi pelo y las medias rotas jijijiji
Podría hacerlo alguien en España, porque mandar el pelo hasta allí me sale un poco caro.
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